Desde pequeña siempre fui
gordita, de hecho la familia de mi papá tiende a ser obesa, tengo una tía
(hermana de mi papá) que es gorda y encima es de mediana estatura, lo cual la
hace ver como una albóndiga con piernas. Todo esto del peso es difícil para mí,
ya que a la edad de los 14 años comenzó mi gran lucha, justo en plena adolescencia
que es cuando las chicas se estiran, salen con sus amigas, se ponen ropa
pequeña, se maquillan, andan de aquí por allá mirando chicos, salen al cine,
comen rico, en especial un delicioso
chanchoal palo, que me encanta y es mi favorito, pero que ya no podré comer más
porque me aumente exageradamente de peso.
A la edad de 18 años llegue a
pesar 80 kilos, un peso muy alto para mí ya que mido 1.60 y además soy muy
joven. Intente de todo dietas, tratamiento, pastillas, infusiones y un sinfín de
métodos pero ninguno resultó, llegué a gastar mucho dinero en cosas y productos
que no me sirvieron para nada, en algunas ocasiones llegaba a bajar un poco de
peso pero luego recuperaba el peso que había perdido y ganaba un poco más, la
verdad es que llegue a pensar que nunca podría adelgazar y que talvez mi cuerpo
no estaba creado para ser delgada y que tenía que aceptarme como soy incluso
llegue a ir a terapias de autoestima porque la tenía por los suelos.
A los 24 años quedé embarazada y
como es lógico aumente más de peso, llegando a pesar un poco más de 90 kilos,
fue algo frustrante para mí a pesar de que estaba muy contenta y emocionada por
la llegada de mi bebé. El tiempo que estuve embarazada vi que se podía tener
fuerza de voluntad ¿por qué? Porque vi que podía dejar de comer algunas cosas
que solía comer constantemente y que ya no podía, como tomar licor (mi esposo y
yo nos íbamos muy seguido de fiesta) comer excesos de dulces, comer grasas y
frituras, entre otros. Todo eso le hacía daño a mi bebé así que me propuse que
cuando tenga a mi bebe sea como sea pondré fuerza de voluntad para bajar de
peso.
Y así fue, tuve a mi bebé el 5 de
febrero del 2013 y me armé de valor, me dije a mi misma no seré más la gorda
que se siente inferior e infeliz con el mundo, tomé la decisión así que empecé
a dejar toda esa comida chatarra que engorda, los dulces, los chocolates, las
harinas, etc. Si en verdad se quiere lograr bajar de peso hay que hacer un
cambio en nuestras vidas, no una dieta rigurosa para perder 10 kilos en una
semana ni nada de soluciones temporales que a la larga lo que único que hacen
es dañar tu salud.
Debemos empezar a comer sano como
por ejemplo, comer frutas, verduras, harinas integrales, jugos naturales,
carnes asadas o al vapor, etc. Hacer actividad física, todos sabemos que debemos
hacer ejercicio pero no es fácil, todos en un primer momento comenzamos muy
emocionados, entusiasmados, con todas las ganas del mundo pero esa alegría nos
dura poco, a veces unos días o quizás un par de semanas y aparece nuevamente el
aburrimiento, la pereza, las tentaciones, en fin.
Esas situaciones donde a veces la
familia se reúne para celebrar algo, preparan comida rica pero grasa en exceso,
es en esas situaciones donde a veces tienes que decir que no y mantenerte firme
en tu propósito y seguir adelante, en el momento uno se siente mal por rechazar
una invitación pero luego se te pasa y te sientes bien por hacer superado ese obstáculo
en tu camino.
Les cuento que así como voy he
bajado unos 20 kilos en casi 6 meses, actualmente estoy pesando 70 kilos y aun
me falta mucho pero para mí ya es un gran logro, ya que siempre pensé que nunca
lo iba a poder lograr, así que si yo puedo cualquiera puede. Los invito a que
se comprometan consigo mismos y dejen de buscar salidas fáciles como bajar de
peso sin dieta ni ejercicios porque eso sinceramente, no existe.
Así que dejen de soñar y vivan el
presente, dicen que la belleza y lo bueno de la vida duele y hay que hacer
sacrificios para lograrlo, así que solo hay que tener fuerza de voluntad y empezar
desde cero. Claro que de vez en cuando uno puede comer por ahí uno que otro
antojito nadie dice que no pero moderadamente, sin exagerar. A veces se nos
apetece un rico
pollo a la caja china o
un rico postre de chocolate pero hay que saber contenerse para no salir de la línea
de lo correcto.
Espero que les haya servido mi
experiencia y les ayude a tener un estilo de vida más activo y sano para estar
en forma.